Esa persona ha tenido la amabilidad de reunirse con nosotros, compartir su experiencia (no sabéis el consuelo que proporciona saber que, al menos sus hijos y los de otros miembros de la asociación se puede decir que han terminado bien) hablarnos de lo que pudieron hacer, de lo que no, ventajas o inconvenientes y problemas que ellos podían haber encontrado. En aquel entonces no había internet y ni siquiera tantos teléfonos móviles como ahora, por lo que las cosas eran diferentes, pero, al leer parte del material que nos ha dejado he de decir que en parte me he sentido frustrada, decepcionada o deprimida...no sé como calificarlo ¿por qué??? Porque unos 15 años después seguimos teniendo los mismos problemas, las mismas inquietudes...
Por otra parte, hay mucho material interesante para aprender un poquito más y me ha llamado algo la atención y por eso quería compartirlo. En aquellos años los diagnósticos se hacían de manera privada y, al parecer la mayoría de los de la zona al menos, en el Centro Huerta del Rey . Con lo que esta madre nos contó que pasó días helados del frío de nuestra zona paseando por Valladolid a la espera de que a sus hijos les realizasen las pruebas. Nos habló de las actividades que hacían y las que nos recomendaba. Incluso nos ha dejado los estatutos de aquella asociación por si nos fuera más sencillo "reabrirla" en lugar de crear una nueva...pero en ello estamos y todo lleva tiempo.
Esta madre acudió por aquel entonces a un "Congreso Internacional de Sobredotación" que trataba la problemática socio-educativa de estos niños y nos ha dejado el dossier en el que he leído esto que os comparto:
¿Por qué estos alumnos deben recibir una educación especial?
Se ha hablado mucho sobre el por qué estos niños tienen que recibir una educación especial, algunos opinan que es necesario tener en cuenta su educación porque constituyen una gran posibilidad de mejorar el mundo en que vivimos y que por tal razón es necesario tener en cuenta su educación. En estos términos incluso se expresan algunos documentos (Comisión de Cultura y Educación del Consejo de Europa, 1993 y 1994). Otros abogan por la necesidad de una educación especial porque si no la tienen probablemente tendrán problemas de motivación escolar, bajo rendimiento y trastornos emocionales, a lo que responden otras personas: "mira aquel joven que hizo tres carreras a la vez y no tiene ningún problema". Sin pararse a pensar que el término de superdotado no incluye en la definición que tengan desajustes emocionales ni inadaptación, puesto que esto no ocurre en todos ni se da en la misma intensidad. .Si bien se ha relacionado frecuentemente que a mayor CI de inteligencia, mayores desajustes emocionales, esto no es totalmente cierto, pues hay niños con un CI de 190 totalmente ajustados a nivel emocional y adaptados tanto social como escolarmente. De las investigaciones llevadas a cabo (Alonso,1993) se concluye que son múltiples los factores determinantes que pueden influir en la desadaptación: la especial sensibilidad, alta creatividad, diferencias de edad, el sexo, etc.
En general, los niños superdotados no están desadaptados en los primeros años, siendo uno de los factores más influyentes la desadaptación del ambiente hacia ellos; imagínese un niño deficiente mental medio en una clase "normal". En primer lugar tendría problemas de rendimiento en el currículo regular porque no se ajusta a su nivel de aprendizaje. Esto daría lugar a posibles conductas desadaptadas dentro del aula, y posteriormente, se plantearían problemas emocionales.
Pero, ¿por qué entonces tienen que recibir una educación especial? Nosotros no pensamos que sea ni para que puedan contribuir al progreso de la humanidad ni para que no tengan problemas: deben recibir una educación especial porque aprenden de forma diferente y más rápida que otros niños y si se les niega la educación que necesitan no tendrán la oportunidad de desarrollarse de una forma óptima, que es lo que debe perseguir la educación: optimizar el desarrollo del niño para que el día de mañana como adulto pueda elegir su propia existencia.
Por lo tanto y considerando lo anteriormente expuesto, no se puede decir que estos niños de educación especial tengan más prioridad que aquellos otros: ¿cuáles son los primeros, los sordos, los deficientes, los motóricos, etc? Todos tienen la misma prioridad pues el no tener la educación que necesitan perjudica su desarrollo en la misma medida. Como ya hemos dicho en muchas otras ocasiones, no se trata de hacer adultos excepcionales sino niños felices.
Hola Estelita.
ResponderEliminarQuiero felicitarte por la manera en que estás educando a tus niños, a veces me recuerdas a mis padres.
¡Sigue así!
Un abrazo,
David Parrado.
Jolines ¡qué palabras!!! No sabes lo que significa eso para una madre. Hago lo que puedo y no es nada fácil pero intento hacerlo de la manera que pienso será más justo para que ellos se sientan bien mañana. El tiempo dirá si me equivoco. Gracias :)
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