Mi hijo pequeño no fue prematuro pero lo parecía desde el sexto mes de embarazo, con lo que cada poco pasaba por urgencias y fue duro el reposo, los nervios por si se adelantaba tanto y la desesperanza porque no acababa de llegar.
Cuento esto porque el momento del parto suele ser de lo más duro y difícil a la hora de tener hijos y hay casos mucho más complicados que los míos.
Fue difícil hacerse a ellos cuando eran bebés, aprender a preparar biberones, a darles el pecho, a bañarlos a la temperatura adecuada, a cuidarlos cuando enfermaban, etc, etc, etc...A pesar de todo eso había muchas cosas positivas por supuesto, cosas y momentos que te llenaban de ternura, alegría y vida...pero echando la vista atrás y pensando, creo que definitivamente lo más difícil, lo peor de ser madre es y ha sido el sistema educativo.
Primero con las esperas que llevarían como suponía, como predije, como advertí y cómo ya imaginaba a la fase dos, a la secundaria, donde ya no se les pide esperar, sino dar mucho más de lo que dan porque son unos "vagos" (palabra que me decían que no usara en primaria para no etiquetarlos y que ahora se ha vuelto demasiado común)...y tanto en una etapa como en la otra ¿quién ha tenido que buscarse la vida?¿quién tuvo que intentar solucionar los inconvenientes y problemas que surgieran?
¿Quién tiene la culpa de que todo vaya...no mal, sino diferente al gusto de la mayoría de los profes? ¿Por qué no se ponen un poco de acuerdo los de primaria y secundaria y van un poco más coordinados?
Vosotras lo sabéis, todo ha sido culpa nuestra pero solo nosotras hemos tenido que buscar soluciones, intentar entender, y además teniendo en contra a quienes deberían ayudarnos en el proceso, pero te encuentras alguna profe como una que se llenaba la boca diciendo:
"A mi me da igual, yo los aguanto un año, pero para vosotras tenéis con vuestros hijos, porque para vosotras será para toda la vida y menuda tela"
Mi respuesta en aquel caso, porque la señora en cuestión era bastante "especialita" fue:
"Tú no sabes lo que yo hago con mi hijo, tú no sabes lo que a mi me cuesta educarle y tú no sabes que en solo un año que esté contigo puedes tirar por la borda todos los esfuerzos que no tienes ni idea que yo puedo estar haciendo, que no tengo que justificarte y que no tengo porqué aguantar que me faltes el respeto"
Pero bueno, a lo que iba. Los que tenemos adolescentes, no solo de Altas Capacidades (¡por fin coincidimos en algo con otros padres!! Dan ganas de celebrarlo) nos estamos encontrando con la desmotivación de nuestros chicos y chicas ante la llegada del bachillerato. Son varias las madres que hemos coincidido con esa desgana por parte de nuestros hijos e hijas. Algunos empiezan a pensar en los módulos de FP, pero otros se están planteado el terminar con la ESO. Y el problema no es que quieran dejarlo o quieran optar a otras cosas, el problema en el que coincidimos las madres es que obtenemos la misma conclusión: "Están desmotivados".
Es cierto que es mala edad y que influyen muchas cosas pero quieren dejar los estudios por no aguantar a ciertos profes, porque se aburren y porque no aprenden nada que les resulte útil ¿Os parece normal?
Cómo hago en muchas ocasiones intento ponerme en su lugar y pensar en cómo me sentía yo a su edad y sí, recuerdos profes que tenían de esto el título, pero había otros que merecían la pena, incluso tuve la suerte de tener alguno con el que estabas deseando que llegara su clase, y no, no penséis mal, no penséis que es porque era muy guapo o algo así y las cosas de adolescentes no, era motivador, llegabas a su clase y no había más. Es cierto, como también he dicho otras veces, que cada uno tiene una manera de ser y no vamos a ser todos igual ni a saber "llevarnos el gato al agua", pero esos con los que aprendías y te invitaban a seguir adelante. Entonces yo intento que mi hijo mire para "esos algunos", que afortunadamente todavía los hay, pero otras veces aguantan tantas injusticias y desprecios que no me extraña que se les quiten las ganas.
Los profes piden respeto, yo soy la primera que creo que deben ser respetados, pero también he dicho otro montón de veces que el respeto se gana, no se impone, y algunos todo lo contrario porque ni respetan, ni valoran, ni nada.
Se supone que la educación es cosa de padres y profes pero cuando hay algún problema la respuesta de nuestros hijos ante la intención de querer hablar con sus profesores para ver qué ocurre es siempre la misma:
-"Mamá, por favor no vayas porque luego la toman conmigo y es peor"
Y esto no solamente mis hijos, también otros que no son de Altas Capacidades. ¿Es normal esto? ¿Qué respeto podemos tener hacia unos profes con los que no podemos mantener una conversación para entender qué ocurre con nuestros hijos por las posibles represalias? Seguramente si eres profe y estás leyendo esto pensarás que no voy a hablar contigo porque no quiero o quizá no me preocupa tanto mi hijo. O tal vez que mi hijo no quiere que vaya a hablar contigo porque me está engañando y así se libra de que me entere. También puede ser que estés más que harta o harto de escuchar a padres con sus estupideces (que los hay lo sé) pero de la misma manera que no es justo juzgar a todos los profes igual, no debería ser hacerlo con los padres.
En fin, que sólo era una reflexión más porque ahora me toca la lucha de convencer a mi hijo de que siga adelante con los estudios por las oportunidades, por las otras cosas que se aprenden, por la "titulitis" de la sociedad en que vivimos, y por no cerrar las puertas a lo que pueda decidir hacer en el futuro.
En fin, que si tuviera que pedir algo sería una vez más ayuda para que mis hijos estuvieran más motivados, que sé que es muy difícil, no voy a negarlo, que les insisto en que hay cosas que tienen que hacer aunque no les gusten porque eso será siempre en la vida, no sólo en los estudios, así que por si le puede servir a alguien, os contaré el secreto que me han dicho a mi este fin de semana. El secreto de la motivación.
El secreto de la motivación que no es otro que: NO DESMOTIVAR.
Al final, tengo la sensación que muchos hacemos lo mismo; tratar de convencer a nuestros hijos de que ciertos comportamientos deben "aguantarlos" porque son parte del camino que los llevará a conseguir un título. Yo también lo hago. Argumentos, palabras. Palabrería. He tenido la suerte de tener hijos de altas capacidades "mansos ", tranquilos, no replicantes. El sistema educativo en este país es vergonzante, profesores desmotivados haciendo abusos de poder...no generalizo, hablo desde mi experiencia con algunos de ellos. Esos mismos que acuden a aulas de críos abusadores que los insultan, les faltan a respeto...esos mismos que después se encuentran en un aula con un manso no contestón y pagan muchas de sus frustraciones con ellos.
ResponderEliminarMi hijo es muy inteligente, muy sensible, empático y crítico. Sabe distinguir el bien del mal, se da cuenta si cae bien, si lo tratan con condescendencia. Comprende demasiado, ve y sufre todo. Su profesor estrella lo ningunea, cuando se ofrece voluntario porque sabe algo, lo ignora; cuando no sabe o no comprende lo humilla: le dice cosas denunciables y al mismo tiempo permite que su hija, compañera del mio, no haga un examen por estar cansada...Mi hijo ve las injusticias.
Me siento el rehén del sistema educativo, no puedes hablar y exigir por miedo a las represalias. Yo acudo regularmente a reuniones vacías que solo sirven para que sepan que no está solo. Qué estoy al corriente de lo que ocurre. Mi hijo no "contesta", siempre oigo es muy buen chaval; bien educado, ayuda a sus compañeros PERO es un poco vago, podría hacer más...Siempre la misma historia. ¿Podría hacer más? Podría hacer tanto menos. Podría aislarse de tu clase para dejar volar su imaginación (que tenéis capada, por cierto), podría tocar durante horas el piano del instituto en lugar de sentarse en una clase magistral de música en la que enseñas cosas que domina hace años; podría bailar y hacer coreografías en lugar de dar veinte vueltas corriendo alrededor de un patio...podría aprender matemáticas y resolver problemas nuevos en lugar de hacer una y otra vez las mismas cosas hasta el aburrimiento.
Tenéis suerte de que su época rebelde, desafiante y cuestionadora la pasase a los 9 años.
Nuestros hijos ven todo esto y no se conforman y nosotras les decimos "aguanta " "confórmate" "resiste". Quisiera poder decirle a mi hijo : protesta; exige; toma. Qué triste , frustrante y desmotivador es todo
Lo has explicado mil veces mejor que yo. Así tal cual. Y la época desafiante de los 9 años lo mismito también.
EliminarUn abrazo y gracias por esta aportación Larosanga.
Hola, soy Sandra y estoy en 2º DE la ESO. No sé si será motivar o desmotivar, pero es importante que sepamos lo que queremos. Yo lo he pasado muy mal hace unos años porque nadie quería ser mi amigo, y al final tuvo que pasar el tiempo para ser una más.
ResponderEliminarAhora estoy muy contenta y ayudo a otros niños que pasaron por mi situación.
Mis padres lograron que yo superara aquel año, haciendo que me ilusionara por cosas pequeñas.
Gracias por esta lectura.
Sandrasingluten.blogspot.com
Muchas gracias por tu opinión Sandra. A veces lo difícil es saber lo que se quiere.
EliminarUn abrazo ;)
Hola,
ResponderEliminarSoy nueva por aquí, he llegado hoy de casualidad buscando información sobre niños con Altas Capacidades.
Mi hijo mayor sospecho (lo digo así porque aun tiene 5 años y no le hemos hecho ninguna prueba) que tiene Altas Capacidades. Lo curioso es que viendo las explicaciones y características de estos niños, he descubierto que tal vez yo también lo sea.
Puede ser hereditario?
Gracias,
Sí puede serlo Miriam. De hecho muchos padres o madres descubren que lo son a raíz de saber que sus hijos tienen altas capacidades. También son muchos los casos en los que son los hermanos (si tienes más hijos), no siempre pero sí muchas veces ;)
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