jueves, 31 de enero de 2013

¿Qué tipo de padres somos?



¿Alguna vez os habéis preguntado qué tipo de padres sois y qué podríamos hacer para mejorar?



Los padres difieren unos de otros en cuatro dimensiones fundamentales que influyen en el desarrollo de sus hijos:


1.- GRADO DE CONTROL. Hay padres que ejercen un alto grado de control sobre sus hijos. Son los que intentan influir en su comportamiento para inculcar unos determinados estándares.

2.- COMUNICACIÓN PADRE-HIJO. Los padres altamente comunicativos son los que acostumbran a explicar las razones que han motivado una medida restrictiva, los que suelen pedir opinión a su hijo y le animan a expresar sus argumentos, escuchan sus razones y pueden incluso llegar a modificar sus comportamientos a consecuencia de los razonamientos del niño.
Los padres con bajo nivel de comunicación serían aquellos que, o bien no acostumbran a consultar a los niños ni les explican las reglas de comportamiento, o acceden a los llantos y quejas de su hijo.

3.- EXIGENCIAS DE MADUREZ. Los padres que exigen altos grados de madurez son aquellos que presionan a sus hijos y les animan a desempeñar al máximo sus posibilidades en todos los aspectos, social, intelectual y emocional, y además, hacen hincapié en que sean autónomos y tomen decisiones por sí mismos.
Los padres que no plantean retos o exigencias a sus hijos, acostumbran a subestimarlo creyendo que no será capaz de realizar una determinada tarea.

4.- AFECTO EN LA RELACIÓN.  Los padres afectuosos serán los que están pendientes de los estados emocionales del niño, los que muestran interés por sus deseos o preocupaciones y expresan alegría y orgullo ante los logros y comportamientos de sus hijos.

Si consideramos estas cuatro dimensiones podríamos diferenciar tres tipos de padres.

1.- PADRES AUTORITARIOS. Se caracterizan por manifestar altos niveles de control  y de exigencias de madurez y bajos niveles de comunicación y afecto.
Debido a que el grado de control es elevado y además son poco afectivos y comunicativos, sus hijos suelen ser obedientes, ordenados y poco agresivos, pero también más tímidos y poco tenaces a la hora de perseguir metas.
La falta de comunicación en estos hogares hace también que sus hijos tiendan a ser poco alegres, aprensivos, infelices, fácilmente irritables y vulnerables a las tensiones.

2.- PADRES PERMISIVOS. Son padres bajos en control y exigencias de madurez, pero altos en comunicación y afecto.
Los hijos de estos padres, como consecuencia fundamentalmente, del bajo nivel de exigencias y control, tienden a tener problemas para controlar sus impulsos y dificultades a la hora de asumir responsabilidades. Suelen ser inmaduros y con bajos niveles de autoestima, pero tienden a ser más alegres y vitales que los hijos de padres autoritarios.

3.- PADRES DEMOCRÁTICOS.  Este tipo de padres se caracteriza por presentar altos niveles en todo (comunicación, afecto, grado de control y exigencias de madurez). No se rinden ante los caprichos de los niños, sobre todo si vienen a través de llantos, gimoteos o impertinencias, sin embargo, pueden cambiar de postura tras escuchar los argumentos del niño.
Sus hijos tienden a tener altos niveles de autocontrol y de autoestima, suelen ser persistentes en las tareas que inician, hábiles en las relaciones con los demás, independientes y cariñosos. Además suelen ser niños con valores morales interiorizados, es decir, enjuician los actos no en función de las consecuencias que de ellos se derivan, sino de los propósitos que los inspiran.


Sabiendo todo esto, probablemente todos nos habremos encontrado dentro de los 3 tipos alguna vez, aunque viendo las posibles consecuencias, a todos nos gustaría estar dentro del grupo de los democráticos ¿verdad?
Esta clasificación la estudié en mis tiempos de "aprender a ser maestra" y siempre me llamó la atención y me gustó. Hoy me acordé y pensé que os gustaría porque puede ayudarnos a conocernos mejor y también a pensar en la manera que estamos influyendo en nuestros hijos cuando los veamos actuar de determinada manera. A mi  personalmente, muchas veces me ha servido como "semáforo" ante alguna actuación de mis hijos. Si se repetía, pensaba sino sería yo la que estaba haciendo algo mal.


2 comentarios:

  1. Yo, todos los días cielo, conjuntamente con Paco, más allá de las clasificaciones, nosotros siempre hablamos del abandonar ese padre/madre que traemos de serie y que te sale de manera espontánea cuando tú no has hecho la reflexión de qué tipo de padre quieres ser. Tú sacas el yo madre/padre de tu casa anterior y ese no es el que más beneficia a tu hijo quizá en ese momento... Por eso es un tema que debe estar encima de la mesa permanentemente como diálogo de pareja...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mi me sirve muchas veces para darme cuenta que estoy haciendo algo mal, aunque otras veces aún sabiéndolo, me enfado porque no sé buscar la solución o me quedo sin ganas de hacerlo bien :S
      Pero, al menos, la mayoría de las veces intentamos hacerlo de la mejor manera posible ¿verdad?
      Un besín ;)

      Eliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...